Miguel P. León Padilla
Participa en MUSICALITURGICA.COM en el Servicio Litúrgico, aportando cada semana una homilía para el Domingo correspondiente.
Sacerdote de la Diócesis de Segorbe-Castellón.
Viernes, 28. Agosto 2015 - 18:25 Hora
XXII Domingo del TO (Ciclo B)
EXPLICACION DE LAS LECTURAS
1ªL.- La ley de Moisés se presenta como expresión de la más alta sabiduría, como expresión de la misma voluntad de Dios y compendio de la alianza en el Sinaí. El pueblo de Israel ha de saber que sólo podrá llegar a poseer y conservar toda la tierra que le fue prometida si cumple las cláusulas de la alianza.
2ªL.- De Dios viene todo bien es llamado "Padre de los astros, porque es su creador y conservador. Por iniciativa de su gracia, mediante el evangelio ha llevado a los cristianos a una nueva vida espiritual. Frente a la "Palabra de la verdad", el hombre tiene unas obligaciones determinadas, que son las que se presentarán a continuación en tres grupos: disposición para la escucha, discreción en el hablar, renuncia a los accesos de ira.
Ev.- Un grupo de fariseos y letrados enviados por el Sanedrín, se escandalizan al ver que los discípulos comían sin lavarse según ordenaba la tradición. Los fariseos universalizan las purificaciones rituales y acusan al Maestro de permitir un comportamiento contrario a la "tradición. Jesús cita al profeta Isaías (29, 13) y denuncia que ellos practican un culto vacío, que se atienen a preceptos humanos y quebrantan sin escrúpulos los mandamientos de Dios.
Después se dirige Jesús al pueblo y promulga otra moral muy distinta que invalida de raíz todas las purificaciones rituales. Lo que importa es la pureza del corazón, la buena voluntad. El que habla aquí es el Hijo de Dios, que está por encima no ya de las tradiciones de los mayores, sino incluso de la misma Ley de Moisés.
PARA LLEVARLO A LA VIDA
La condición de discípulo de Jesus no se juega en el cumplimiento de ritos o normas. La autentica religiosidad no se cifra en credos o doctrinas sino en la nobleza del corazón y actitudes de sinceridad. En el empeño por liberar el corazon de todo aquello que hace impuro al hombre, que lo contamina y hace daño a los demás. La relación de realidades toxicas que Jesús ofrece es amplia, abarca la intimidad personal y las relaciones sociales: el matrimonio, el ámbito económico y laboral.
Es ahí en esas realidades de nuestra vida cotidiana, donde se juega la autenticidad o falsedad de nuestro seguimiento de Jesús. Necesitamos los mandamientos a título educativo, porque nos recuerdan los principios del comportamiento. Los mandamientos externos tienen como razón ultima ayudar al germen interior de la madurez cristiana.
Pero no hay nada más opuesto al ser cristiano que la servidumbre de las normas y preceptos. Cuando más maduro se es en la fe, más secundarios se van haciendo las normas porque el cristiano obra desde el Espíritu que habita en su corazón.
La palabra de Dios en nuestras vidas -la ley del Señor- debe ser acción, acción liberadora y el comportamiento cristiano nos hace verdaderamente libres. Lo que verdaderamente importa es la pureza del corazón, la buena voluntad. Pues lo que mancha al hombre no viene de fuera, sino que sale del interior.
Domingo, 9. Agosto 2015 - 00:39 Hora
XX Domingo del TO (Ciclo B)
EXPLICACION DE LAS LECTURAS
1ªL.-La sabiduría personificada invita a su banquete a los que necesitan verdadero saber y les ofrece pan y vino, símbolo del alimento que da la vida en la plenitud. La imagen del banquete remite a participación en la fuente de la vida, la salvación en Dios.
2ªl.- La carta a los Efesios hace una síntesis de la vida cristiana desde el principio de que en Cristo todo ha adquirido un nuevo y definitivo sentido: el querer salvador de Dios ha llegado a plenitud en él. Esto lleva al creyente a celebrar la fe en comunidad, y a vivir un nuevo estilo de vida. Esta segunda parte recoge los avisos que Pablo hace a los cristianos; construir el triunfo de Jesús en nuestra vida exige una toma de postura definida.
Ev.- Hasta ahora había hablado Jesús del pan de vida que baja del cielo, del pan que regala el Padre a los hombres enviándoles a su Hijo. Pero ahora habla Jesús del pan que él mismo les dará y se refiere expresamente a su carne y sangre, los dones eucarísticos. El escándalo nace no sólo porque los judíos lo están malinterpretando en sentido material, sino porque no están dispuestos a aceptar a Jesús como revelador del Padre.
PARA LLEVARLO A LA VIDA
De la enseñanza de Jesus sobre el pan de vida hay, en síntesis, podemos sacra tres consecuencias:
-Atiende primero a la necesidad del pan material, el alimento del cuerpo, y pide a sus discípulos: "Dadles de comer vosotros" (Lc. 9, 13). No pude presentarse el evangelio sin preocupación por las necesidades físicas de los destinatarios: Pan y catecismo.
-La fe en Jesús alimenta la esperanza, sacia las hambrunas del corazón y el alma humana; da sentido a la vida y respuesta a los interrogantes del hombre.
-Redescubrir la Eucaristía en tanto es comunión profunda con Dios, con Jesús y en cuanto comporta solidaridad con los hermanos. Compartir la misma vida y el mismo destino,
El cuerpo de Cristo se entrega para la vida del mundo. ¿Entendemos lo que ello exige de nosotros cuando comulgamos? Jesús al repartir el pan entre sus discípulos, les invitó a todos a tomar parte en el sacrificio de la cruz.
Entonces le dejaron solo. Tambien nosotros le dejamos solo cuando recibimos el cuerpo de Cristo, pero no comulgamos con su pasión y muerte. Preferimos el pan de los ángeles, a entregar nuestras vidas para la salvación del mundo. Jesús nos advierte: "El que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por el Evangelio, la salvará" (Mc, 8, 35). Comulgar con la misión de Cristo es hacer nuestros los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren" (GS1). Nada verdaderamente humano puede estar lejos del corazón de los discípulos de Cristo.
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