Usted está aquí: Inicio

Miguel P. León Padilla

Participa en MUSICALITURGICA.COM en el Servicio Litúrgico, aportando cada semana una homilía para el Domingo correspondiente.
Sacerdote de la Diócesis de Segorbe-Castellón.

Sábado, 3. Octubre 2015 - 11:09 Hora
XXVI Domingo TO (Ciclo B)

EXPLICACION DE LAS LECTURAS
1ªL.- El espíritu de Dios es luz y fuerza. El que lo recibe es su testigo y viene sobre aquél a quien nadie ha designado. Es don gratuito, no para propia utilidad, sino para servicio. Moisés recibe ayuda de Dios en la guía del pueblo de quienes, como él, son testigos del espíritu. Cuando todo el pueblo lo reciba y pueda dar testimonio, será la plenitud escatológica
2ªL.- La predicación del Evangelio no es un sermón neutral, que pueda satisfacer a todos; sino una denuncia, clara y definida, de las desigualdades económicas y sociales que dividen artificialmente a la humanidad en clases sociales y económicas.
Ev.- Jesus advierte que la autoridad ha de ejercerse con amplitud de espíritu, abierta a todos los que defienden una causa justa, aunque no sean cristianos; excluye la cerrazón ortodoxa, el sectarismo... Además se muestra a favor de los "pequeños" que creen en Jesús. Poco estimados, más ignorantes o débiles en la fe, jamás hay que hacerles tropezar (escandalizar).
PARA LLEVARLO A LA VIDA
"No se lo impidáis: el que no está contra nosotros está a favor nuestro". También a nosotros puede pasarnos lo mismo. sentir celos de que otros "que no sean de los nuestros" hagan el bien y no logremos controlarlo. Josué y Juan eran buenas personas, eran fieles a Moisés y a Jesús, y precisamente por eso se creían poseedores en exclusiva de su favor. Y recibieron la lección.

De cuando en cuando vamos al médico a hacernos un chequeo. Hoy podemos examinarnos y ver si estamos en sintonía con el de Jesús. La comparación con la actitud de Cristo nos hará ver si tenemos un corazón mezquino o abierto. Si tendemos a acaparar el bien o la verdad o controlar los carismas del Espíritu.
Deberíamos ser más tolerantes, más abiertos, y alegrarnos de que se haga el bien y de que prosperen las iniciativas buenas, aunque no se nos hayan ocurrido a nosotros, y reconocer que no siempre tenemos nosotros toda la razón. Siguiendo a Juan el Bautista, el Precursor, cuyo lema era: "Que él crezca y yo disminuya".
En este mundo, dividido y confundido, los cristianos tenemos un mensaje y una tarea: trabajar por la unidad, luchar por erradicar todo cuanto divide y enfrenta a los hombres. Nuestro puesto está en trabajar contra la injusticia, en desenmascarar toda ideología que segrega. Para Jesús los nuestros son todos los que no están expresamente contra nosotros. Esto significa que podemos y debemos sumar nuestros esfuerzos a los de todos los hombres de buena voluntad, aunque no compartan la misma fe o se expresen en modos distintos.
La fe cristiana es fuerza de Dios para la unión de esfuerzos en favor de la justicia, de la igualdad y de la fraternidad.

Sábado, 3. Octubre 2015 - 11:09 Hora
XXV Domingo (Ciclo B)

EXPLICACION DE LAS LECTURAS
1ªL.- El justo es la acusación serena y más intolerable de la injusticia del mundo. Denuncia con ser y estar. El sabio se inspira en la imagen del siervo paciente para hacer el retrato del justo desde el punto de vista de los impíos. Estos le ponen a prueba, para ver si se mantiene; y ponen a prueba a Dios, para ver si se ocupa de él. Es la reacción ante su reto. Aunque no pueda demostrarlo, el justo mismo es la demostración de que Dios está con él.
2ªL.- Recoge una nueva exhortación moral, de tono apasionado. Santiago nos hace caer en la cuenta de la posible deshumanización en la vida social centrada en el egoísmo o el deseo de dominio y poder de unos sobre otros. El placer ha de entenderse aquí en términos generales, como la tendencia humana hacia la "hybris" o desmesura. Y tampoco el cristiano está expuesto a ese peligro. La ambición y los deseos de placer dividen al hombre en su interior, al no poder alcanzar lo que desea; se produce la envidia y se proyecta al exterior, afecta a la vida comunitaria y da origen en ella a las discordias y a los conflictos. Un consumo desenfrenado que estimula al hombre a tener siempre más es hoy la raíz de muchas frustraciones que, a su vez, desatan la violencia y dan pábulo a la agresividad. El hombre permanece insatisfecho porque no pide a Dios lo que realmente necesita y, por lo tanto, no pide bien.
Ev.- Los discípulos tenían miedo de preguntar a Jesús, porque vislumbraban que su respuesta iría contra sus ambiciones personales. Muchas veces nuestra ignorancia es culpable, porque eludimos la pregunta sincera y sin recámara.

PARA LLEVARLO A LA VIDA
El camino del servicio a los demás hasta dar la vida se opone al camino del dominio sobre los demás. Pero nos resulta muy difícil comprender el camino de Jesús, porque la ambición y la voluntad de poder están arraigadas fuertemente en nosotros. Los que ostentan la autoridad sirven al pueblo mandando. Justamente lo contrario de lo que enseña Jesús: "Quien quiera ser el primero que sea el último de todos y el servidor de todos".
El desea ser entendido. Cogiendo a un niño, probablemente a un pequeño criado, en un abrazo se identifica con él y define su persona y estilo, la nueva autoridad.
Servir a un siervo, acogerlo como a un importante señor, es el camino para quien le sigue y le ha tomado como Maestro.
Esa debe ser la actitud que defina a quien quiere ser "el primero" siguiendo a Jesús, y dar crédito a su enseñanza. En el siervo a quien se sirve, en el hombre sin atributos ni dignidad a quien se entrega, en el inocente y en el pueblo llano, se acoge a Dios en un encuentro real y personal. "Me acogen a Mi, acogen al que me ha enviado".

Nueva contribución  Vieja contribución

Iniciar sesión