Usted está aquí: Inicio

Miguel P. León Padilla

Participa en MUSICALITURGICA.COM en el Servicio Litúrgico, aportando cada semana una homilía para el Domingo correspondiente.
Sacerdote de la Diócesis de Segorbe-Castellón.

Sábado, 21. Abril 2018 - 18:33 Hora
IV Domingo de Pascua (Ciclo B)

1ªL.- Pedro da testimonio por vez primera ante los tribunales, denuncia a los constructores que se han equivocado creyeron que Jesús era un "ripio"; pero resulta que es la "piedra angular", la que se necesita en los cimientos. Jesús es quien da solidez al pueblo de Dios, lo más funcional del edificio.
2ªL.- El pleno conocimiento de Dios coincidirá con el pleno conocimiento de los hijos de Dios. Cuando llegue ese día, el día en que veamos a Dios cara a cara, sabremos lo que somos y seremos semejantes a Dios, nuestro Padre. Dios nos alzará a la altura de sus ojos para que nos veamos y reconozcamos en ellos. Y se manifestará que Dios es amor y que los que aman han nacido de Dios.
Ev.- Jesús afirma que es el buen pastor, refiriéndose las profecías del AT y presentándose como el Mesías prometido.
PARALLEVARLO A LA VIDA
Tendemos a ser como ovejas, consumidos por la preocupación y el miedo, siguiendo a unos y otros. Por no escuchar la voz del Pastor. Por nuestra concupiscencia hay una fuerte tendencia a ir por mal camino con autosuficiencia. Es nuestra naturaleza alejarse, rechazar a Dios, y romper sus mandamientos, con esto, corremos el riesgo de perdernos.
Jesús es el buen pastor porque da la vida por sus ovejas. Dar la vida significa estar dispuesto y disponible, no mirar el reloj, darse sin calculo ni medida, en una entrega absoluta por convicción. No ha habido ni puede haber otro, nadie puede ocupar su lugar. Los pastores en la Iglesia sólo pueden hacer visible en el servicio de Cristo dando la vida por las ovejas.
El asalariado en vez de dar la vida, vive de las ovejas. Por eso las abandona cuando llega el peligro. No hay que pensar que el texto hace alusión sólo a los fariseos del tiempo de Jesús o a los que se presentaron como Mesías y llevaron al pueblo al matadero.
Las ovejas no son de Pedro ni de los obispos; son las ovejas de Cristo. Y él “Conoce” personalmente a cada uno, con un conocimiento interior, profundo, cordial. San Juan nos invita a profundizar en esta experiencia de ser hijos de Dios. Todo se fundamenta en el conocimiento y en el amor. Conocimiento muto donde se gestan la filiación y la fraternidad: yo las conozco y ellas me conocen, como el Padre me conoce y yo a él; del que nace el amor, que se palpa en la entrega incondicional
“Tengo también otras ovejas...”, y como él, nosotros hemos de ampliar nuestros horizontes para que todos los seres humanos puedan escuchar la Buena Noticia para hacer que descubran la cercanía amorosa y entrañable de Dios.
Jesús se hace entrega radical en solidaridad con el hombre, da su vida en favor de los que quiere. Y no con altiva beneficencia sino con la sencillez del que ofrece lo que más quiere por el amor que tiene a otro. Nosotros hemos de hacer lo mismo imitando su ejemplo… en esta sociedad desorientada, pastoreando (con el testimonio de vida) a quienes alrededor nuestro andan erráticos y exhaustos.

Domingo, 15. Abril 2018 - 10:52 Hora
III Domingo de Pascua (Ciclo B)

1ª L.- La predicación de Pedro y los prodigios que la acompañaban levantan la admiración de la gente; Pedro les recuerda su complicidad en la muerte de Jesús e invita al arrepentimiento.
2ªL.- Destaca Juan la misión intercesora de Jesucristo. Si alguno tiene la desgracia de pecar, debe saber que no está sin abogado. Jesús no sólo es la víctima de propiciación por nuestros pecados sino por los del mundo.
Ev.- Tras su encuentro con el resucitado, los de Emaús han ido a contar su experiencia a sus compañeros. Todavía están hablando cuando vuelve a hacerse presente Jesús. La experiencia de un Jesús resucitado real produjo en los apóstoles un cambio de categorías: se hacen testigos de la muerte y resurrección de Jesús.
PARA LLEVARLO A LA VIDA
Súbitamente, se presenta el Señor, y les saluda: "Paz a vosotros". Aunque todos tenían noticia de la resurrección por el testimonio de Pedro y los de Emaús, la presencia de Jesús les sorprende. El les tranquiliza y les convence de que es verdad lo que están viendo y de que no se trata de un fantasma.
No es posible comprender cómo un cuerpo glorificado, sometido a la acción del Espíritu que es la fuerza de Dios, pueda ser palpado e ingerir alimento. El sentido de este apunte es que el Señor vive verdaderamente, y que lo que los discípulos han visto no es una simple "visión".
Los apóstoles sólo pueden ser testigos de Jesucristo si están plenamente convencidos de que él mismo que murió bajo Poncio Pilato… ahora vive para siempre. Jesús les abre el sentido de las Escrituras para que comprendan que todo ha sucedido como había sido anunciado por los profetas. Las Escrituras deben ser interpretadas a la luz de la experiencia pascual. "Abrir el entendimiento" significa comprender que todo recibe su sentido en la pasión y pascua de Jesús.
Jesús representa el cumplimiento de las promesas históricas del Dios de Israel, pero también la satisfacción de las esperanzas del corazón humano.Ahora comprenden que su Maestro no ha sucumbido ante sus enemigos. Pues todo ha sucedido tal y como "tenía que suceder" para que se cumpliera la voluntad de Dios. La fe no puede evitar lo que "tiene que ser", pero puede siempre aceptar la realidad e interpretarla, sabiendo que de una u otra manera todo sucede para la salvación de los hombres y la gloria de Dios.
Esto no es fatalismo, sino realismo cristiano, en el que la esperanza se hace resistencia allí donde todos los optimistas fracasan y todos los pesimistas abandonan. Pues también la muerte que "tiene que ser", puede ser aceptada con esperanza y ganada para la vida.
La misión de Jesús ha terminado, pues todo ha sido cumplido. Ahora resta que los apóstoles anuncien a todo el mundo lo que han visto y oído. Resta que se predique en todas partes, comenzando por Jerusalén, que Dios salva a los hombres en Jesucristo y concede el perdón de los pecados.

Nueva contribución  Vieja contribución

Iniciar sesión