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Miguel P. León Padilla

Participa en MUSICALITURGICA.COM en el Servicio Litúrgico, aportando cada semana una homilía para el Domingo correspondiente.
Sacerdote de la Diócesis de Segorbe-Castellón.

Domingo, 6. Diciembre 2020 - 21:01 Hora
Solemnidad de la Inmaculada

1L.-El relato del Génesis nos abre a la esperanza. Dios amenaza, pero no rompe el diálogo; castiga pero no se olvida de la humanidad, pide cuentas, pero no se aleja de nosotros. Si el Señor llama, busca, habla, es garantía de salvación.
2L.-Como "hijos de Dios" somos también "herederos" de todos los bienes de su reino; pero la plena posesión de la herencia sólo será posible tras la resurrección de los muertos. La unión con Cristo mantiene en nosotros viva la esperanza de alcanzar los estos bienes.
Ev- La Anunciación es la antítesis del Génesis. Allí no hay una serpiente que tienta, sino un ángel que anuncia. No hay un fruto prohibido, sino un fruto bendito en el vientre. No hay una mujer que se deja tentar, sino una mujer que se fía y entrega. A la mujer del «no», se contrapone la mujer del «sí». A las maldiciones, contraponen las bendiciones. Al espíritu maligno, se contrapone el Espíritu Santo. A Eva se contrapone Maria en colaboración a la obra de la redención.
PARA LLEVAR A LA VIDA
Son las palabras del ángel, y no tanto su inesperada aparición, las que turban a María. "Llena de gracia" significa "colmada del favor de Dios". El ángel le dice que Dios la ha elegido para que en ella se cumplan todas las promesas de Israel, por eso es "bendita".
Y le da a conocer cómo sucederá todo, sin menoscabo de su virginidad: por la fuerza del Altísimo. El Espíritu de Dios "la cubrirá con su sombra" lo mismo que hizo la "nube" que cubría el arca de la Alianza, y el Espíritu de Dios que en la creación se cernía sobre las aguas... Se trata de un símbolo de la poderosa fecundidad de Dios y de su presencia santificante.
María comprende y, libremente, responde con su "sí" humilde y obediente. Así se convierte en el Arca de la Nueva Alianza; en Virgen-Madre del Hijo de Dios. El niño será grande y será llamado "Hijo del "Altísimo".
La Inmaculada, que nunca estuvo sujeta a la esclavitud del pecado, fue la mujer más libre, sin los condicionamientos de un mal pasado, y por ello madre de Dios, porque quiso serlo, capaz de asumir una función especialísima en la historia de nuestra salvación.
Dios quiso liberar a María de pecado para ser Madre de Jesús. Y quiere que nosotros luchemos por hacer retroceder el pecado del mundo para que cada hombre y mujer alumbre a Jesús, el Salvador. Anunciamos la Buena Noticia combatiendo el mal en la historia, al tiempo que lo evitamos en nuestra propia vida para vivir santos e irreprochables.

Sábado, 5. Diciembre 2020 - 06:58 Hora
II Domingo de Adviento (ciclo B)

1L.-Entre los desterrados, hundidos en la desesperanza irrumpe una buena noticia de liberación. El pregonero grita desde la altura, para que todos sepan que la culpa tiene perdón, que Dios está ya en camino con su pueblo, como en un nuevo éxodo de servidumbre a libertad, y que está mostrando su fuerza salvadora reuniendo a los dispersos.
2L.- Hemos esperar vigilantes el día del Señor, pero podemos anticiparlo; porque si Dios tarda es para que nosotros nos convirtamos, nuestra conversión acelera su venida.
Ev.-Juan llama a penitencia, a cambiar la mente y el corazón. Quién hace penitencia se sumerge en el futuro de Dios, que esta viniendo, y deja atrás al hombre viejo y un mundo viejo. Esto es lo que simbolizaba el bautismo de Juan.
PARA LLEVAR A LA VIDA
Si la actitud que se nos proponía el domingo pasado era "Vigilad", la de hoy es "convertíos". Es decir, creed en Jesús, aceptad sus enseñanzas, acoged su evangelio, concretadlo en actitudes de vida.
El Bautista, nos invita a una transformación, a cambiar, a "preparar el camino del Señor, allanar sus senderos..." Lo que S. Pedro resume en su carta, anticipar: "un cielo nuevo y una tierra nueva, en que habite la justicia".
Adviento es preparar el encuentro.

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